Ehun milak. Cronica de un intento

El gran reto para el que había intentado prepararme estos últimos meses, la Ehun Milak, no ha podido ser, de las cien millas que recorren esta bonita zona del Pais Vasco, solo me han dejado hacer 100 kilómetros.
El riesgo de tormentas fuertes en la zona de Aralar (Tchindoki) y los horarios de paso por esa zona obligaron a la organización a neutralizar la prueba a partir de las 3 de la tarde, a la gente que aun no se había adentrado en Aralar.
Esta circunstancia a mi me pillo de lleno, y por unos minutos. Si antes lo hubiera sabido, habría apurado un pelin mas y no me tomaría tanto tiempo en los avituallamientos, hubiera pasado sin problema.
Pero son las cosas del directo. EL calor excesivo me hizo tomar con prudencia las horas centrales del día, y ser muy conservador, pues lo podía pagar muy caro después, y quedaban muchos km. La idea era aprovechar siempre la noche para hacer km y poner el ritmo bueno. Pero ahi se quedo la idea.

A lo que vamos... Que es la cronica:
Buen ambiente y gran amabilidad de los voluntarios en el control de material y dorsales. Siempre atentos, me indicaron todas las dudas y mas.
Nervios y un calor agobiante ya a las 10 y media de la mañana, indicaban una dura prueba.

Despues de los detalles del dorsal y demas, nos acercamos a Zaldibia donde teniamos el hotel hasta el lunes.

Bajamos el rollo de las bolsas para los puntos de vida, en las que llevaba de todo, Una muda completa incluso zapatillas, temas de ducha, algo de comida, pastillas de sales algo para el estomago, esparadrapo, para la ampollas etc. si hacia falta se usaria y si no mejor.

Yo iba de primerizo en una prueba asi, y no esta de mas tomar precauciones.

Lo que mas me preocupaba era mi pie derecho, que llevaba tocado, por una molestia-dolor-adormecimiento, que me podia poner las cosas dificiles.

Decidi usar aunas zapas de trequing ligeras y poner unas plantillas de gel delante y taloneras de espuma en el talon y algo funciono.

Con el calor que hacia, intente tomar algo en los bares con aire acondicionado, pero aun asi, sudaba de lo lindo.
Muchos nervios al acercarse la hora, y mucha emocion en el control de salida, con la plaza llena de coprredores y de gente animando y los aizcolaris (No se si es asi) dedicandonos una danza. Espectacular!!
A las 6 de la tarde en punto dan la salida , y ahora si, a desfogar.
Cantidad de gente animando por todo Beasain...
Pronto comenzamos a subir primero por asfalto y ya por pistas y senderos entre bosques.

La gente ya estirada y el calor sofocante.
Yo pongo buen ritmo para cojer una posicion adelantada, para intentar llevar el ritmo que pensaba, para intentar acabar sobre las 36 h je, je...

Los primeros km siempre se sufre, hasta que encuentras tu ritmo y pasan los nervios.
Lleve unos 3 litros de agua encima, para no tener que rellenar continuamente, en un litro lleve mezclado geles de glucosa e hidratos, y las sales en pastillas, bendito invento.
Mucho beber, mucho beber y pastilla cada media hora.
En los primeros km corri mucho, no por prisas, que esto es muy largo, corria para refrescarme con el aire de la velocidad, y no veas que bien sentaba, pues ni gota de aire y un bochorno... A 35 g salimos de la plaza.

Ya por fin pasamos el primer monte, con un ambiente de carrera espectacular, con la peña animando.
Bajadita tranquila y llano y subidita.

Que bonitas son las cumbres vascas. En esta zona mas suaves y muy boscosas.

Y llegamos al primer avituallamiento, lleno de peña y con musica incluida.
Aqui el horario estimado, con media h de adelanto.
El ritmo que llevo es tranquilo, dejandome llevar en las bajadas y conservador en las subidas, sin desgastar.

Despues de esto, llegamos al primer coloso del dia, con una furte subida de frente, casi hasta los 1000 m.
Alli me encuentro con un grupo pequeño, que resulta ser David el del blog Aire libre. Me reconocio por el acento.
 Los acompañe durante la bajada a Zumarraga, y nos reencontramos en el avituallamiento de allí.

Estos si que iban furtes. Me alegro por ellos, que si llegaron a meta.
En el avi. comi un poco a lo loco, y ya empeze a notar sintomas de malestar, y nada mas empezar a subir, primero al santuario o iglesia, ya iba con bastante nausea, para evitar revolver el estomago, comi un poco de barrita de choco y platano para asentarlo, y algo mejor fue.
Pero ya no me encontraba nada bien, otra nausea y mas barrita.

Bonitas vistas de la subida, ya dentro de la noche.
Llego bien al alto del monte y ahora tocaba una bonita cresta de algo de caliza y bosque bajo preciosa, pero yo ya no disfrutaba, notaba mareos, sobre todo cuando paraba de correr.
Cuando comenzamos la bajada yo ya iba bien jodido, me entraba el sueño y los mareos eran mas grandes haciendome deambular de lado a lado del sendero. Yo pensaba que era la falta de sueño de esta noche y los nervios previos. Pero en realidad era una pajara de las gordas, me tube que sentar al final en un tronco y pasar alli un buen rato, me tome dos pastillas de glucosa, a ver si daba llegado al siguiente avituallamiento con intencion de echarme a dormir, pues no podia andar casi. A trompicones di llegado al avi, pidiendo que me dejaran dormir, como no lo consegui, me tome tres o cuatro calditos, y un par de sandwich, y sali camino de Azpeitia, que me dicen que alli puedo dormir.

La cara de la derrota... O no !!
Nada mas salir del avituallamiento ya veo que soy capaz de correr y subir a buen ritmo, poco a poco entro en carrera y el sueño se disipa, y empiuezo a ser feliz de estar corriendo por alli y disfrutar del esfuerzo.
Recupero con rapidez mis sensaciones y el tiempo perdido, y ya en la bajada, me tiro por aquella calzada rota a muy buen ritmo, llegando a Azpeitia muy bien, ahora si que me voy a tomar con calma los avituallamientos, para evitar malestares en el estomago que, ahora esta bien, pero puede volver a fallar. Me tomo mi tiempo e hidrato con calditos, y como sandwich salados, u poco de fruta y palante.
Ahora una subide de las duras nada mas salir del asfalto, impongo buen ritmo, pero en las zonas llanas me despego de la gente corriendo con facilidad, y ya llegando a la cima del Gazume camino del collado de Zelatun alcanzo a la gente con la que compartia km. Menudo subidon, por que voy muy fresco y fuerte.

Aqui el paisaje es espectacular, con unas vistas alucinantes, desde la vista del mar , incluso Sansebastian hasta las altas cunbres de Aralar.
Me quedo prendado y disfruto como un enano.

En el avituallamiento unas risas con la gente tan maja que siempre encontrabas. Y sin ninguna prisa, me hidrato y como bien, pra empezar el flanqueo en subida de la cruz de Ernio, que se hace muy duro, por el terreno y el castigo que llevamos.

Larga cresta que nunca se acaba, continuo sube baja, y paisajes hermosos.

Para comenzar el largo descenso a Tolosa, muy largo. Aqui las piernas ya protestan un poco y bajo sin cargar mucho, pues aun queda muchisimo.

Alegria en el habituallamiento de Tolosa, voy con una hora de adelanto sobre el horario que preveia.

Aqui como un buen plato de pasta, una ducha y cambio de ropa, y me voy a hacer un masajito, para descargar cuadriceps que me van a hacer falta en las bajadas que quedan.

Me lo tome con tanta calma, que heche hora y media en Tolosa. Pero no habia prisa, pues ahora el calor y el sol eran los dueños y no queria una lucha contra ellos, con calma hacer km, hasta la noche.

A esta altura me junte con Jorge un Zaragozano muy majo y gran persona, nos pusimos un ritmo muy comodo los dos juntos hablando de cantidad de cosas. El iba un poco tocado de la rodilla y habia que llegar.

Llegando al avituallamiento lo paso un poco mal, pero llegamos. Y como no unas risas que nos echamos con los voluntarios.
Aqui ya nos comunican que por el riesgo de tormenta, se piensa neutralizar a todos los que no pasen el collado del Tchindoki antes de las tres, y a nosotros no nos va a dar tiempo.
Alli una sorpresa de una llamada a los voluntarios de una chica que resulta la novia de Jorge que esta en Amezqueta esperando, y ya me doy cuenta yo que Maria tambien me espera.

Salimos corriendo los dos, Jorge parecia recuperado.
Pero en la fuerte bajada ya le dice la rodilla que no, hicimos un apaño pero no da muy buen resultado, y a esta altura me dice que tire, que no va  a tener problema. Y yo me hecho a correr, voy ligero, y adelanto mucha gente, y por fin llego a Amezqueta donde me esperaba Maria, que bien.
Aqui ya llevo media hora de retraso por mi horario, no hay problema, el tema era llegar entero arriba, con ese sol abrasador.
Pero aqui ya nos comunican despues de estar a punto de partir, que estamops todos neutralizados por las tormentas.
Siento una gran deshilusion pues queria seguir y me encontraba muy bien y contento.
Despues me sentiria aun peor, por el tiempo que habia empleado en entrenar esta prueba y lo duro que se me habia hecho esos meses casi sin tiempo para el entreno.

Pero estaba muy contento con las sensaciones y lo que me habia gustado la prueba, tanto como para volver el año que viene, si no a la larga, a la corta, pues recorre los montes que tanto queria yo subir, el Aizcorri y el Tchindoki.

Ahora quedaba la celebracion, a falta de una fueron dos, je, je...

Ehunmilak, volvere, te rete y me quede en el camino, me probaste y casi me puedes. Al final solo pudieron los elementos con mi participacion.
No se sabe lo que habria pasado en la segunda parte de la prueba, si la montaña hubiera podido conmigo o yo con ella. Eso sera en otra ocasion si la hay.
Tendre que seguir buscando el limite en otra ocasion, queda para otra ocasion el reto de las 100 millas, esta vez me quede con 100 km (97 en realidad) no deja de ser mi mayor distancia, Y salieron 5200m de desnivel positivo. No estuvo mal.